Las piscinas infinity de agua salada se han convertido en el símbolo definitivo del lujo mediterráneo. En la Costa Blanca, donde el horizonte azul es el protagonista, la piscina no puede ser un simple rectángulo cerrado; debe ser un espejo que dialogue con el paisaje.

En La Quinta Fachada, entendemos que la piscina es el centro de la vida estival. Por eso, apostamos por la fusión de dos conceptos que elevan la experiencia de baño: la estética del “borde infinito” y la salud de la cloración salina.

El arte del borde infinito: Más que una piscina

El diseño “infinity” o desbordante es un truco visual arquitectónico que nunca deja de impresionar. Al hacer que el agua rebose por uno o varios lados, eliminamos la barrera visual del borde.

El resultado es mágico: desde dentro del agua, la línea de la piscina se funde con la línea del mar o del cielo. En villas situadas en altura, como en Altea Hills o Cumbres del Sol, las piscinas infinity de agua salada crean la sensación de estar flotando en el aire.

Técnica y precisión: Este diseño requiere una ejecución técnica impecable por parte del arquitecto. Es necesario calcular milimétricamente el nivel para que la lámina de agua sea perfecta y diseñar un canal de recogida oculto que mantenga la estética limpia.

Salud y confort: Por qué elegir agua salada

El diseño entra por los ojos, pero el confort se siente en la piel. Olvida el olor a cloro químico y los ojos rojos. La cloración salina es el estándar de oro para las piscinas de lujo modernas.

¿Cómo funcionan las piscinas infinity de agua salada?

No es agua de mar (que tiene mucha sal), sino agua con una ligera concentración de sal común. A través de un proceso de electrólisis, esa sal se convierte en un desinfectante natural potente y, lo más importante, inodoro.

Beneficios inmediatos:

Piel de seda: El agua salina actúa como un suave antiséptico natural. No reseca la piel ni daña el cabello, al contrario, deja una sensación suave.
Adiós a las abejas: Al no haber olor a productos químicos fuertes, las avispas y abejas se sienten menos atraídas hacia el agua.
Sostenibilidad: El mantenimiento es más sencillo y ecológico, ya que se reduce drásticamente el uso de productos químicos agresivos.

Materiales y atmósfera en las piscinas infinity de agua salada

Para que el efecto sea completo, la elección del material del vaso es crucial.

Porcelánicos de gran formato: Atrás quedaron los pequeños gresites azules. Hoy usamos piezas grandes de porcelánico en tonos arena, turquesa pálido o piedra gris. Estos colores logran que el agua tenga un color azul caribeño o verde esmeralda mucho más natural y elegante.
Iluminación nocturna: La piscina cobra una segunda vida de noche. Diseñamos iluminación LED integrada que hace brillar el agua desde dentro, convirtiendo las piscinas infinity de agua salada en una linterna escultural que decora el jardín mientras cenas.

Un oasis diseñado para ti

Tener una piscina es común; tener un oasis privado es exclusivo. La combinación del diseño arquitectónico desbordante con la tecnología de la cloración salina transforma el simple acto de bañarse en una experiencia de bienestar.

Si quieres que tu jardín se funda con el Mediterráneo, contacta con nosotros. En La Quinta Fachada diseñamos piscinas infinity de agua salada que harán que no quieras salir del agua.